"Ante la
proximidad de la Pasión, fortaleció la fe de los apóstoles, para que
sobrellevasen el escándalo de la cruz"
* Gn
22,1-2.9-13.15-18: "El sacrificio de Abraham, nuestro padre en la fe"
* Sal 115,10 y
15.16-17.18-19: "Caminaré en presencia del Señor en el país de la
vida"
* Rm 8,31b-34:
"Dios no perdonó a su propio Hijo"
* Mc 9,2-10: "Éste es mi Hijo amado"MONICIONES
ENTRADA: Bienvenidos, hermanos, a esta celebración de nuestra fe, que nos llena
de gozo y de esperanza. Caminamos en esta cuaresma, preparándonos para celebrar
el centro de nuestra fe: que Cristo Jesús es el primogénito de entre los
muertos, y que nuestro destino está unido al suyo. Cristo Jesús murió, pero
también resucitó y está a la derecha del Padre intercediendo por todos.
LECTURAS: Escuchamos el relato de la Transfiguración de Jesús en el Tabor; allí
los discípulos ven que Jesús es la manifestación de Dios: "Este es mi Hijo
amado; escuchadle"; pero no podemos quedarnos en esa grandiosidad sin
bajar a la vida diaria; hay que pasar a la historia y al mundo, sabiendo que
Dios la lleva a su plenitud, y que es preciso el trabajo continuo y la búsqueda
del bien.
ORACIÓN DE FIELES
Acudimos
ahora llenos de confianza a Dios Padre para pedirle que atienda nuestras
necesidades. Juntos le decimos:
¡SEÑOR, DANOS TU LUZ!
1. Por la Iglesia, llena de la Luz de
Jesús, para que sea en el mundo creadora de esperanza para cuantos sufren y
viven tristes. Oremos.
2. Por
los cristianos, para que nunca dudemos en nuestra fe, y llenos de esperanza busquemos lo que favorece el perdón, la unidad y la paz. Oremos.
3. Por
todos los que buscan un mundo mejor y más humano, para que encuentren el apoyo
y el respeto que merecen, y sus esfuerzos sean reconocidos y apoyados. Oremos.
4. Por
nuestra comunidad, para que las dificultades y el desánimo no nos
venzan; para que renovemos la entrega y la fidelidad a Dios y a las personas.
Oremos.
Oración:
Señor, danos tu Luz que nos ayude a reconocer el verdadero camino que nos lleve
a amarte a Ti, amando a los hermanos. Por Jesucristo.
OFERTORIO: Cada día estamos invitados a vivir en la esperanza de Dios, a ser esa
luz y esa sal que tanto necesitan las personas. Es el mismo Jesús quien nos
guía, para que todos vivamos en la Luz.
COMUNIÓN: Cristo Jesús murió, pero también resucitó y está a la derecha del Padre
intercediendo por todos. Cierto que pasamos por momentos de duda y de
incomprensión, pero es entonces cuando tenemos que reafirmar nuestra confianza
en el valor de la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario